Con la finalidad de dar a conocer el esquema de retribución por servicios ecosistémicos aplicado en Costa Rica, la Asociación para la Investigación y Desarrollo Integral (AIDER) – Perú realizó un seminario virtual del 11 al 13 de octubre, el cual contó con la participación representantes de la sociedad civil y de instituciones públicas y privadas.
A través de la actividad se pudo conocer la experiencia en el manejo de los servicios ecosistémicos en Costa Rica, lo cual permitirá que dicho esquema de trabajo que viene funcionando positivamente a favor del medio ambiente, se replique en el Perú adapto a la realidad.
El seminario contó con la disertación de los expertos el Ing. Luis Felipe Vega Monge, Director Ejecutivo de la Oficina Nacional Forestal de Costa Rica; además del Ing. Axel Chavarría Ulate, Gestor de Desarrollo Organizacional de la Oficina Nacional Forestal de Costa Rica; quienes explicaron detalladamente el funcionamiento del esquema de pago por servicios ecosistémicos de Costa Rica.
Los especialistas precisaron que mencionado país posee cuatro servicios ambientales, los cuales poseen sistemas operativos, presupuesto, normativa regulatoria, manuales de procedimientos y funciones, etc. En cuanto al marco regulatorio, por ejemplo, se ha establecido un impuesto al combustible, el cual promueve que cada ciudadano page un impuesto único; por ende, a través de dicho pago compensa parte de las emisiones o contaminación que genera el uso de sus vehículos.
También se dio a conocer el programa de incentivos que busca incorporar del sector privado y este reciba las ventajas competitivas del mismo. Se explicó además las modalidades de los programas desarrollado tales como la conservación, protección o manejo de bosques, regeneración natural, recursos o la parte más productiva como la reforestación y sistemas agroforestales.
Se destacó que desde el año 1997 al 2020 se ha incorporado el 27% de prestatarios o dueños de finca bajo la sombrilla de servicios ambientales. “Se ha reconocidos a cada uno de los prestatarios que optaron por establecer en su propiedad un proyecto de conservación o proyecto productivo que, a la vez, le retribuye a la comunidad, al país y al mundo servicios ambientales esenciales”, acotaron los especialistas.
También se informó sobre los mecanismos e instrumentos de fondeos exitosos. Una de las experiencias desarrolladas en Costa Rica es Ecomarchamo (Fondo de Biodiversidad Sostenible), la cual promueve que los propietarios de vehículo opten por un pago voluntario para reducir al 100 por ciento las emisiones de su vehículo al año; además, se dio a conocer las alianzas estratégicas con la banca nacional para el diseño de una tarjeta de débito que destina al fondo un porcentaje de las interacciones que se realizan mediante los comercios, lo cual permite la ejecución de programas de biodiversidad.
La región Piura actualmente carece del mencionado esquema de trabajo sin embargo ha proyectado la elaboración de un manual de pago por servicios ecosistémicos, contemplado y adaptando la experiencia de Costa Rica.